De tanto pensar(te), detento tu presencia, intento ejercer cierto poder sobre tí pero no te puedo alcanzar
mas que con un adjetivo, acariciar un
par de palabras que evocas, acariciar por turnos una g, una x, una m
imaginarias que una máquina de escribir igual de intangible golpetea en mi
cabeza. Siempre he pensado que la máquina de escribir es un ave hambrienta.
Ávida de verte, divago un poco, paso los dedos en el teclado
de plástico, pienso en teclados de Taiwan, bailo un poco, recreo tu piel,
recreo, recrear, recrearse, me divierto un poco y te traigo a mi lado en forma
de un texto inacabado que imita tus movimientos erráticos, tu sonrisa resignada
y esas voces agudas que usas para
coquetear.
Un poco de licor podría ayudarme pero no me gusta el licor,
podría decirte que vengas y entretenerme con las luces y sombras sobre tu piel descuidadamente dejada a mis ojos.
Descuidadamente… cuando te vea todas las letras caerán como agua desde mi cabeza
y armarán una túnica suave y vaporosa, móvil como mil hormigas caminando sobre
curvas y pliegues, formarán todas las
posibilidades de palabras, las que conocemos y las que no existen más que en tu
superficie, se detendrá con calma el hormigueo y tampoco podré tocarte, detenerme
en una palabra o inventar las que sean necesarias. Intimidad/Intimidar, me
intimida un poco tu elocuencia epidérmica.
...verte llegar...
Se armarán músculos y piel, gotas diminutas, un planeta
completo, deberé deambular ya sin
palabras, renuncio a declararme observadora absorta, voyeuse, y me declaro
vagabunda, deambuladora, saunterer/sauntereuse(¿?) Tierra Santa la de tu piel, el
hormigueo de un ejército de letras se detiene. Impelidos por el deseo labios, lengua (órganos fonadores) iniciarán una
nueva batalla, la conquista de la palabra, algún sonido ahogado emitiremos.
Algunas palabras fluirán.
(no podrán
mal juzgar a mis labios por acercarse en pos de algunas palabras nuevas)
*****
Yo quería escribir sobre la ciudad, sobre caminar, olfatear, contemplar, descubrir correr, sobre parkour, scouting técnico, Thoreau, Herbert, método natural, pero me has distraído de nuevo, tú,territorio nuevo. En lugar de planeta puede que seas una ciudad sinuosa, una ciudad con neblina, y así diré (forzadamente) que mi texto habla de deslizarse sensualmente por las calles, por los senderos sin salida por las paredes que se entregan al grafitti, por los dedos que palpan paredes, y los pies que barro, asfalto, concreto, piedra de por medio acarician el suelo urbano, diré que buscaba un discurso nuevo sobre la ciudad, ciudad bailada, humedecida, arrastrada.
El desplazamiento urbano, la movilidad, el placer de habitar,de moverse, y de vivir en la ciudad quedan pendientes, penden rítmicamente.